El Instituto de Misiones Consolata llegó a 120 años de vida y misión. Su fundador el beato José Allamano, junto al Santuario de Nuestra Señora de la Consolata en Turín (Italia), creó esta congregación el 29 de enero de 1901 y, en la actualidad, cuenta con 1.500 misioneros y misioneras (sacerdotes, religiosas, hermanos y obispos) repartidos en 28 países de Europa, África, América y Asia.
Los primeros misioneros fueron enviados por Allamano a África en 1902. Jaime Parias, consejero general para América, explicó que “allí comenzaron la primera misión en Tuthu, una región del pueblo kikuyu, en Kenia. Bajo la protección de la Consolata, y con el carisma de la misión ad gente”.
“El 29 de enero de 1910, el padre José Allamano fundó también la Congregación de las Hermanas Misioneras de la Consolata con el mismo carisma. Este año celebran 111 años de fundación”, acotó.
Sentirse en casa
El superior general Stefano Camerlengo ha asegurado que “muchos pensamientos nos habitan en este momento complicado y particular. A mí personalmente, aprovechando el aniversario de la Fundación, me gustaría llamar la atención sobre la recuperación del significado de sentirse como en casa, de sentir al Instituto como nuestro propio hogar”.
“Mi voto, mi oración, mi invitación, es que vivamos este aniversario de la Fundación recuperando nuestro sentido de pertenencia, de sentirnos parte, protagonistas de nuestra familia, de nuestra comunidad, conocidos y llamados por su nombre, constructores de un Instituto que es cada vez más nuestro, cada vez más mi casa”, ha expresado.
Foto: IMC